Carta a Papá Noel

on domingo, 11 de diciembre de 2011
Querido Papá Noel,

Mi obsequio de Navidad como siempre, no es más que mi sencilla carta escrita desde niña, esta vez con un consejito. Pasa que en tu larga y basta trayectoria obsequiando todo lo inventado, aún no has agarrado experticia suficiente para con las mujeres, situación que ha obligado a los Caballeros, en su desesperación de dar gusto a sus Damas, a recurrir a la malvada frase: "Escoge lo que quieras que yo lo pago".


Se que tu prioridad son los niños y aún estoy agradecida por todo lo que me tocó en mi turno, aún recuerdo a mi muñeca Susy, mi triciclo celeste, la Barbie Durazno y la Familia Corazón; sin embargo he crecido y aún sigo esperando mucho de ti (y de acuerdo a mi último estudio de mercado, el resto de mujeres también lo hacen).

Primero: aclaremos el término "mucho": por las buenas razones de Dios, las mujeres seguimos llamando así a todo lo que sea detalle y tiempo, poco tiene que ver la cantidad y el dinero; segundo: "seguir esperando" es una suerte de la vida, ya que mal estuviera que por haber pasado la etapa de la niñez, no esperemos sentirnos sorprendidas y tercero: el resto de mujeres también esperan, estoy segura porque pertenezco al gremio; sobre los hombres, te doy el permiso absoluto de darme una lección.

Habiendo explicado las razones del caso y con todo el respeto que se merece un señor de milenaria edad, aquí va mi consejito:

Las mujeres en esencia somos parecidas en cualquier lugar y a toda edad, a pesar de nuestra educación, nuestro trabajo y nuestra condición social, nuestro espíritu femenino se mantiene, por lo que apuntar a él será siempre un acierto.

Papá Noel, no importa tu bolsillo, habrá siempre un dulce en la pastelería, tus manos siempre podrán escribir una carta, tendrás una vela para encenderla, apagar las luces y disfrutar una velada, siempre habrá un radio donde toquen una hermosa canción para bailarla, siempre podrás dar un masaje a una espalda cansada y en todas las épocas del año encontrarás una flor en el muro de cualquier casa.

Papá Noel por favor, no hagas caso del marketing con el que te quieren convencer, te lo dice una marketera! Obsequia detalles y dile NO al bono navideño.

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